Bienaventurado el hombre que confía en el Señor. Es como árbol plantado a orillas de un río, cuyas raíces penetran hasta encontrar el agua; árbol que no agobia al calor ni angustian los largos meses de sequía. Su follaje se mantiene verde y produce en todo tiempo jugosos frutos...
Buscad a Jehová mientras puede ser hallado, llamadle en tanto que está cercano. Isaías 55:6